Hace dos días vi el nuevo programa de National Geografic llamado "Turistas en la mira" y rememoré el no tan grato recuerdo del hurto de mi cartera con cien dólares y más de doscientos euros en el metro de Madrid, casi apenas con un mes de estar en esa ciudad y en espera, para mi desgracia, de guardarlos en una cuenta de banco. Ya me habían advertido que en Madrid había robos a turistas, pero jamás pensé que yo sería una de ellas.
En el metro hay muchas distracciones. Metro de Madrid |
Solo con ver el programa recuerdo con rabia, impotencia y un montón de sentimientos que se imaginarán, que en mis narices desapareciera mi cartera. No lo podía creer, no sentí nada. Ese suceso, desbarató el ideal que tenía sobre Europa: "Europa es perfecta" y desarticuló uno de los prejuicios que cualquier latinoamericano, que no ha cruzado el charco habrá pensado: "Allá, no suceden esas cosas a menudo", lo cual no es cierto, es un continente como todos, con sus problemas y virtudes, con experiencias ya vividas, que no lo hace más ni menos que otros. Este hurto me llevó a la realidad y me enseñó que no todos somos iguales y que por su puesto, no se puede generalizar. Después les diré por qué.
Madrid de noche, después de clases |
Estar en una ciudad extranjera, sin efectivo, con las tarjetas de crédito bloqueadas, es lo peor que te puede pasar, gracias a Dios y a las personas que conocí no la pasé tan mal, pero la sensación no se la deseo a nadie. Las primeras 48 horas me sentí la estúpida más grande del mundo. Repasé cada minuto en el metro, tratando de entender cómo fue que no sentí nada.
Aprendí, que en la mayoría de los países europeos a diferencia de Panamá, el "carterismo" es una actividad profesional por excelencia. ¡Wao, de verdad que son perfectos! y pequé por ingenuidad. No, porque los panameños seamos ingenuos, sino que estamos acostumbrados (por lo menos yo) a que una arma reluciera (ja...ja...ja), y más yo que trabajo en medio de una zona exclusiva y otra roja (solo las divide una calle) y nunca me había pasado nada, nunca me habían robado en mi vida; a pesar de que me encanta caminar por las inmediaciones de la peatonal y Avenida B. De modo que prefiero el sistema de los carteristas, en este caso españoles, que el panameño. Si me hurtaran de nuevo, ojalá tenga el privilegio que sea uno de ellos o un aprendíz.
Ahora bien, rescatando el documental que me pareció interesante. El protagonista estaba en Praga, una ciudad que tuve la oportunidad de conocer y que me pareció excepcional, una verdadera postal, sin embargo, este nos muestra lo fácil que un turista puede ser presa de los estafadores, carteristas y hasta redes de prostitución.
Una de las cosas que me pareció extraña del documental era lo sencillo que las personas que timaban al protagonista, se dejaban hacer la entrevista como si nada, mínimo: "Bueno te timé, y qué, así me gano la vida", aunque todo lo que vi en el documental, lo observé durante el año que estuve en aquel continente y que nosotros en América no estamos exentos, solo que pensé en aquel entonces, que no lo vería tanto.
Estación de metro en Valencia, en plena fiesta de las Fallas, ni idea de dónde estábamos Caro y yo. |
Tengo muchas anécdotas, la mayoría me sacan una sonrisa, ahora: desde personas mudas que te piden que cooperes con efectivo para su agrupación de mudos y que a la postre no son para nada mudas (París); personas que te quieren leer la mano con una "palmita" y le dices que no y te persiguen maldiciéndote y tratándote de robar (Barcelona, Granada); personas que se aprovechan de los turistas que entran en las iglesias, a fin de pedirte limosnas y ganan -creo que hasta un salario- con esa pedidera; personas que se hacen las técnicas del metro para enseñarte a usarlo como si el aparato, no te lo dijera en mil idiomas (Roma) y hasta el super carterista, que con sus manos mágicas me desapareció mi cartera dentro de una mochila en el metro.
Después de ver el documental que me encantó, porque recordé con placer aquel viaje que realicé con mis amigos y comprobé que la mejor manera de movilizarte en Praga es con los tranvías y no con taxis, comencé a buscar información sobre seguridad en un viaje. Así, les doy mis recomendaciones, que unidas a mi experiencia les serán de una gran ayuda.
- Si vas en el metro, evita lugares aglomerados, si no te queda de otra pon tu bolso adelante, en tu pecho. Los bolsillos de tu bolsa ciérralos, si puedes hazle un nudito, en algunas bolsas se puede y si eres varón coloca tu cartera en el bolsillo de enfrente de tu pantalón.
- Si sabes a dónde te diriges en el metro, evita quedarte en la escalera eléctrica. El peatón que se queda quieto es presa fácil de los carteristas. Fui testigo cómo chequeaban el bolso de un compañero de viaje que estaba parado en la escalera.
- Antes de ir a una nueva ciudad, estudia cuáles sitios son de alto riesgo. Recuerda no estás en tu país. Evita las áreas rojas.
- Si estás en sitios abiertos, no seas ostentoso con equipos eléctricos, revisa a tu alrededor cuando tomes una foto, eres presa fácil y te pueden arrebatar la cámara o tu bolso. No lleves objetos valiosos contigo.
- En algunas ciudades o en su mayoría se permite andar con una copia de pasaporte u otro documento de identificación. Deja tu pasaporte en un lugar seguro (yo hice esto y evité que mi mal fuera peor), anda con una copia apostillada o notariada del pasaporte con indicación de salidas y entradas. En Panamá, puedes andar con una copia notariada o apostillada (mucho mejor) de tu pasaporte, pero que la copia tenga la entrada y salida del país, esto es importante, sino pasarás una mala jugada.
- No dejes todo tu dinero en un solo sitio, si lo pierdes por lo menos tienes un respaldo. (Créeme funciona me ha pasado)
- Si te toca tomar un taxi, es preferible pedir taxi de "piquera" o de estación, avisa en el hotel o donde te quedas que lo tomarás (si estas en una ciudad no segura). En Argentina, te recomiendan por ejemplo, tomar como taxi los llamados "remisse".
- No desatiendas el equipaje. Nunca lo dejes solo. No aceptes el cuidado de equipaje de otras personas que no conoces, puedes pasar un mal rato.
- Llevar contigo la dirección del hotel y cómo llegar a él; además del teléfono de un contacto. (Una vez me perdí y no podía ni repetir el nombre del hostal, estaba en alemán, ja ja era un 31 de diciembre a las 10 de la noche, una linda odisea)
- En algunas ciudades, como por ejemplo Barcelona, hay mapa de robos si eres un adicto a las redes sociales puedes buscar mapas de robos, el de Barcelona es Twitter con el hashtag #maparobos
- Esta recomendación es para Marruecos, Marraquech. Si vas al Zoco, elige tú solo lo que deseas comprar, si te llega un guía este te puede dar mil vueltas para hacerte creer que te hizo de super guía y al final con lo que tú compres, él gana una comisión, sale más cara tu compra. Mi recomendación, si vas sin grupo turístico o solo es mejor tener una buena guía de viaje. Lonely Plantet son buenas.
- Por último y no menos importante, diviértete, a veces estar como Mr Maggo funciona, eso sí con seguridad.
Me encantó el metro de Londres, por lo menos esta sección |
Al final quieren saber cómo quedó mi historia con el carterista y por qué les digo que no se puede generalizar. En mi cartera había un letrero que decía: "En caso de emergencia llamar a....". Un señor de Madrid, dueño de un kiosco de revistas en la Avenida Príncipe de Vergara encontró mi cartera y llamó a Panamá, a mi madre para arreglar una cita y entregarme mis documentos, no me importaba ya el dinero, sino mi cédula, mi licencia de conducir, mi cartera, ¡en fin!. Cuando le dije que le quería dar algo por su gesto de generosidad, me contestó: "No quiero que te lleves una mala impresión de mi país, ni de mi ciudad, ya bastante daño te han causado". Él borró todo concepto preconcebido y concebido que tenía de la ciudad y de las personas hasta entonces. Nadie creía la historia, ni yo misma. A ese señor, siempre le estaré agradecida.